Reforma del Poder Legislativo

La próxima legislatura al Congreso del Estado de Quintana Roo, la XVIII, deberá tener sumo cuidado en nombrar a los presidentes de las 25 comisiones ordinarias, de acuerdo con el perfil profesional que amerita el cargo, pues en algunos casos el error que comenten las y los diputados, es nombrar a un técnico en asuntos que requieren de un profesional.

Si bien es cierto que cada comisión tiene un Secretario Técnico que debe ser un especialista en la materia, la o el Presidente debe de tener los conocimientos básicos para responder sobre el tema en particular, ¡no que luego dicen cada burrada cuando se les entrevista! Digo, poque es lamentable que una Comisión como lo es la de Educación, Ciencia y Tecnología, esté a cargo de una persona que tiene secundaria trunca; esto no se trata de discriminación, sino de profesionalización del servicio público.

Precisamente ayer, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), publicó su informe sobre “El Censo Nacional de Poderes Legislativos Estatales”, donde Quintana Roo ocupa el lugar 11 de los 32, en cuanto al ejercicio anual del Presupuesto Público, con un monto de 477 millones 700 mil pesos (25 legisladores), superior en un 50.74 por ciento al de Campeche que ejerce por año 236 millones 300 mil pesos (35 legisladores); y un 68.28 por ciento arriba del de Yucatán que ejerce 151 millones 500 mil pesos (25 legisladores).

Hay que hacer otra observación para las y los futuros legisladores, y es que deben de adelgazar la nómina del personal de apoyo con la que llegan a la Legislatura; no es posible que de acuerdo al Inegi, Quintana Roo esté dentro de los diez estados con mayor personal para actividades de apoyo, con 152 para 25 diputados (a razón de 6 personas asistentes por diputado), cuando en Yucatán con el mismo número de diputados tienen 3 personas de apoyo; o más extremista, como en Campeche con 35 diputados solo tengan a 19 personas para las mismas funciones.

Con solo esta muestra, es entendible que el presupuesto del Poder Legislativo en Quintana Roo, esté más elevado que el de sus vecinos estados de Yucatán y Campeche.

Así que los próximos legisladores quintanarroenses, deberán entrarle de lleno a la Reforma del Poder Legislativo, no solo en el tema de reelección y asignación de comisiones, sino en una revisión profunda de las plazas creadas en las unidades administrativas que les auxilian para llevar a cabo su función como Legislador(a), para que el ciudadano pueda percibir el beneficio que trae una Legislatura; además de quitarse el mote de “levanta dedo”. Ahí se las dejo…

SASCAB

Si de reforma hablamos, en Quintana Roo es urgente una en el Poder Judicial, donde parece que las cosas no andan bien; pues en algunos casos donde las víctimas son mujeres, le dan la razón al victimario, solo por ser influyente o venir de una familia con mucho poder económico.

No sabemos el fondo del por qué torcer la justicia, lo que si sabemos identificar es cuando los intereses del Poder Judicial de Quintana Roo, contravienen los preceptos del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien todos los días lucha contra la corrupción de los magistrados, de los jueces y de los ministerios públicos, al grado tal que una de sus metas antes de dejar el cargo, es sanear lo que él ha llamado “un Poder al servicio de los intereses creados”. Al tiempo…

Caminos del Mayab.
Por Martín G. Iglesias.